El almacén aduanero es un lugar autorizado por la Aduana para almacenar mercancías extranjeras antes de su nacionalización o reexportación. Los importadores pueden utilizar estos almacenes para ingresar su mercancía al territorio nacional sin tener que pagar los derechos arancelarios y otros impuestos. Esto les permite contar con un stock disponible de manera inmediata, lo que beneficia a sus clientes al reducir el plazo en la entrega de los productos.
Además, si el importador es el consumidor final de las materias primas o productos intermedios, el uso de un almacén aduanero le permite mantener su liquidez al no tener que pagar los impuestos de los productos que no necesita en ese momento. De esta manera, los importadores pueden ahorrar en costos al enviar directamente la mercancía al almacén aduanero.
Otro beneficio importante es la facilidad de pago por el servicio de almacenamiento, que puede extenderse hasta los 30 días siempre y cuando la mercancía permanezca en el almacén durante ese tiempo. La mercancía puede permanecer en el almacén aduanero hasta por un año, lo que permite al importador programar la salida de la mercancía de manera parcial después de pagar los derechos arancelarios. Esto optimiza el tiempo y cubre las necesidades propias y de sus clientes de manera inmediata.
En conclusión, el uso de un almacén aduanero puede ser una excelente opción para los importadores que buscan reducir los costos de importación y mejorar la eficiencia en la entrega de sus productos. Si deseas más información sobre cómo bajar los costos de importaciones, te invitamos a leer nuestro próximo artículo.
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